Se cumplen 12 días de paro nacional dirigido por la poderosa Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (CONAIE). Los indígenas y otras organizaciones sociales del país se enfrentan a una brutal represión policial y militar por orden del Gobierno del presidente Guillermo Lasso, que llamó al diálogo.
El presidente Lasso acusa a los dirigentes indígenas de golpistas y que no quieren dialogar.
"No es que el movimiento indígena no ha querido dialogar, tenemos 530 años dialogando y 530 años muriendo a manos del Estado", manifestaba una lideresa indígena durante la marcha hacia el Parlamento.
En tanto los asambleístas del bloque UNES pusieron este viernes a disposición sus cargos para activar mecanismos de la muerte cruzada contemplado en el artículo 130.2 de la Constitución del Ecuador y adelantar las elecciones.